Como si se tratara de una carrera al mejor estilo del Gran Prix, tres vehículos libraron una lucha de poder al volante donde su mejor aliada era la velocidad y el premio; el cobro de una deuda pendiente.
Una vez más la guerra narco en el Caribe del país, esta vez en Siquirres, a la altura del puente sobre Río Hondo en la provincia de Limón cobra la vida de dos de sus “soldados”, los cuales no pudieron burlar a la muerte.
La encomienda era dejarlos en medio de un charco de sangre, sus cuerpos inertes como trofeos de la brutal batalla del tráfico de drogas.
La lluvia de balas cobró la vida de dos sujetos identificados como Juan José Hoyos Rodríguez de 32 años y Cristian Rodríguez Castro de 30, alias “Periquito”, quien en enero pasado se había logrado deslizar de las garras de la muerte después de un atentado que sufrió en la afueras en la localidad de Limoncito. Ayer el joven no corrió con la misma suerte y quedó tendido en plena calle.
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